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Es bueno para ti ¡y también para el bien común!

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Revisado el 1 de marzo de 2024

Entendiendo la immunidad colectiva

Es Bueno para ti ¡y también para el bien común!

Cuando usted recibe una vacuna, no solo se está protegiendo de la enfermedad. Está ayudando a proteger a su familia, amigos y a los demás.

Es un concepto conocido como "inmunidad colectiva" o "inmunidad comunitaria". Le mostramos rápidamente cómo funciona.

UN VIRUS OCUPADO

Supongamos que gérmenes nocivos ingresan a una comunidad donde solamente unas pocas personas están vacunadas contra la enfermedad que producen. Los gérmenes se diseminan con rapidez. Puesto que hay tanta gente que no está protegida, muchas personas pueden terminar enfermándose.

SE NECESITA UN GRUPO DE PERSONAS

Analicemos una situación más saludable. La inmunidad colectiva se presenta cuando se vacuna a una cantidad suficiente de personas, y eso dificulta que los gérmenes se propaguen. Las personas vacunadas tienen sistemas inmunológicos que detectan y combaten el virus. Muy pocas personas se enferman, y son menos los gérmenes que pueden infectar a otros integrantes de la comunidad.

LOS QUE MÁS SE BENEFICIAN DEL GRUPO

La inmunidad colectiva es muy importante, ya que no todo el mundo puede vacunarse. Algunas personas, como los bebés, las mujeres embarazadas y las personas con sistemas inmunológicos débiles, no pueden aplicarse ciertas vacunas. Pero si la mayoría de las personas que los rodean se vacunan, estarán mucho más protegidas contra los gérmenes que tratan de infectar a la comunidad.

UNA ACCIÓN COLECTIVA

Las vacunas son seguras y eficaces, y poseen un historial de resultados sensacionales, ya que salvan innumerables vidas. Continúan siendo la mejor manera de protegerse a sí mismo y a los demás de muchas enfermedades contagiosas y graves.

UN LUGAR MÁS SEGURO PARA TODOS

Este es solo un ejemplo de la inmunidad colectiva en acción: A mediados de los años sesenta, se declaró una epidemia de rubeola. Se contagiaron más de 12 millones de estadounidenses. La rubeola mató a 2,000 bebés y generó 11,000 abortos espontáneos. Luego, en 1969, se lanzó el programa de vacunación contra la rubeola. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention, o CDC), la rubeola se erradicó en los EE. UU. en 2004. Los casos más recientes se dieron en personas que vivían o viajaban fuera del país.

¿Sus hijos están al día con sus vacunas?

Hable con su médico para averiguarlo.

Fuentes