Skip to main content
Un dolor de cuello. ¿Cuál es la causa?

Revisado el 11 de octubre de 2024

El dolor de cuello es lo suficientemente común como para convertirse en un cliché. Eso puede ser porque el cuello es más propenso a sufrir lesiones y trastornos que el resto de su columna vertebral. ¿Y las buenas noticias? Por lo general, el dolor de cuello es temporal y solo necesita tratamiento en el hogar.

ANATOMÍA DEL CUELLO

El cuello está formado por siete huesos cervicales (vértebras) apilados uno encima del otro. Entre estos huesos hay discos que actúan como cojines amortiguadores. Los ligamentos y músculos proporcionan estabilidad a la estructura. Las raíces nerviosas se ramifican desde la médula espinal a través de aberturas en las vértebras. La presencia de problemas en cualquiera de estas áreas puede causar dolor.

Siga desplazándose para conocer algunas causas comunes del dolor de cuello.

DESGASTE

El desgaste normal y los efectos del envejecimiento pueden causar artritis, que puede ejercer presión sobre las raíces nerviosas. Esto provoca lo que se conoce como un "nervio pellizcado".

Un nervio pellizcado puede causar dolor que se extiende hacia el hombro, una sensación como de "alfileres y agujas" en la mano y debilidad en los músculos del brazo o la mano.

El desgaste también puede contribuir a una hernia de disco.

Qué debe hacer: Su médico puede sugerir que tome analgésicos de venta libre (OTC) o recetados, use un collarín cervical suave para descansar los músculos del cuello y haga fisioterapia. Si el dolor y los otros síntomas no desaparecen, es posible que necesite cirugía para obtener alivio.

LESIÓN

Los movimientos repentinos, como un accidente automovilístico o una caída fuerte, pueden causar problemas como un esguince de cuello, una distensión o la llamada lesión por "latigazo cervical". Los síntomas pueden incluir dolor en la parte posterior del cuello, espasmos musculares y dolor en el hombro, dolores de cabeza, rigidez en el cuello y hormigueo o debilidad en los brazos.

Qué debe hacer: Los esguinces y las distensiones generalmente sanan con el tiempo. El dolor a menudo se puede aliviar con analgésicos de venta libre. También puede usar una bolsa de hielo en la parte posterior del cuello para reducir la inflamación.

El dolor de cuello intenso después de una lesión es una emergencia médica. Y cualquier dolor de cuello después de un accidente o caída debe ser evaluado por un médico.

MALA POSTURA O USO EXCESIVO

Mantener el cuello en una posición durante mucho tiempo, como al conducir, leer o trabajar en una computadora, puede provocar dolor de cuello. Al igual que dormir en una posición incómoda.

Qué debe hacer: Tome descansos periódicos de las actividades que tensionen el cuello e intente mantener una buena postura levantando la cabeza y manteniendo los hombros hacia atrás y hacia abajo, en lugar de sentarse en una posición encorvada. Además, trate de evitar dormir boca abajo con la cabeza hacia un costado. En cambio, duerma de lado o de espaldas con el cuello apoyado.

ESTRÉS

El estrés emocional puede causar tensión en el cuello, así como dolor de cabeza relacionado con la tensión.

Qué debe hacer: Las técnicas de relajación pueden aliviar los síntomas de estrés y tensión. Es posible que desee probar ejercicios de respiración profunda y relajación muscular progresiva.

CUANDO EL DOLOR DE CUELLO NECESITA ATENCIÓN INMEDIATA

El dolor de cuello a menudo mejora con tratamientos prudentes y tiempo. Su médico puede brindarle consejos sobre cómo tratar mejor sus síntomas.

Obtenga atención médica de inmediato si le duele el cuello por los siguientes motivos:

  • Si ocurre después de una lesión, como un accidente automovilístico o una caída. (Si la lesión es grave, llame al 911).
  • Si se extiende a los brazos o las piernas.
  • Si no desaparece.
  • Si tiene lugar junto con dolores de cabeza, entumecimiento, hormigueo o debilidad.

MÁS INFORMACIÓN SOBRE SU ESPALDA

Su cuello, o columna cervical, está estrechamente relacionado con el resto de su espalda. Descubra cómo funcionan todas las partes juntas.

VER LA ANATOMÍA DE LA ESPALDA

Fuentes